Y aunque falen del mineru,
tamien podría falar
del valor del que navega
y del peligru del mar.
Hay un costero a tu nome,
y un derrame de carbón.
Una mano en la peseta
y otra nel detonador.
De la unión de los minerus
grita fuerte el corazón
una mano en la peseta
y otra en el detonador.
El conveniu va pa llargo
y habrá reestructuración.
¿Con qué coño nos quedamos
tras dos siglos de carbón?
Nun pedimos imposibles
que nun caigan de caxón.
Una mano en la peseta
y otra nel detonador.
De la unión de los minerus
grita fuerte el corazón.
Una mano en la peseta
y otra nel detonador.
Por todos aquellos que quedaron en los pozos, los que sufrieron derrumbamientos o los que simplemente tuvieron que bajar día tras día a jugarse la vida a la puta mina.
Préstame un sueño para que me emocione y lo persiga.
viernes, 11 de febrero de 2011
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He sentido un magnetismo que me ha llevado a comentarte.
ResponderEliminarMe parece sencillamente preciosa.
El sueño que te presto es que sigas adelante escribiendo porque aquí hay alguien que seguirá adelante escuchándote.
Besos.