lunes, 25 de octubre de 2010

Molinillo, muele.

Lo que surgió como un fin acabó antes de ser un medio. Sobre el escenario se corrieron las cortinas y apareció poco más que un puñado de polvo de estrellas que crecía cada vez más mezclado con otros instrumentos inútiles. Títeres descabezados, una guitarra sin cuerdas, un par de condones pinchados y un reloj de cuco sin cuco, todo ello apilado sobre el polvo que cubría toda la tarima. Sólo polvo. Me ofreció un cigarro extendiéndome su pitillera y acepté mientras me desplomaba sobre mi butaca ya rozada por la nube de smoke. Fila 4, asiento 11. Viaje sin retorno. Y sin ida. No había próxima parada. Lo que surgió como un medio resultó ser el fin.

Molinillo, para de moler.

jueves, 14 de octubre de 2010

Vándalo!


Si vas a decidir por mí
podías tener la decencia de explicarmelo,
y de salir al balcón, que tengo cuatro cosas que decirte.
Las mimas de siempre, sí,
pero no sé cómo hacer para que suenen, cada vez,
un poquito más alto.

"Yo me voy. De todas formas dime si te espero, si volamos de la mano, si me invento un mundo nuevo. Que me quiero dejar llevar, mojarme el dedo y... No esperes que te diga dónde acabaremos"
(Letra de "Bucle", de Miki Ramírez "Mr. Kilombo")